Según el informe del Global Entrepreneurship Monitor (GEM) para el período 2022-2023, los españoles perciben el actual panorama del país como un entorno que ofrece escasas oportunidades para emprender, con un acceso limitado a conocimientos y una red de contactos poco desarrollada.
Las estadísticas revelan que el 58% de la población que considera la posibilidad de lanzar su propio negocio en España se siente paralizada por el miedo al fracaso y, por lo tanto, no se atreve a emprender. Esta apreciación se refleja en los índices globales del Contexto de Emprendimiento Nacional (NECI), los cuales ubican al país en el puesto 42 con una puntuación de 4, muy por debajo de la media europea de 4,8. Esta baja calificación refleja la desfavorable situación económica que no incentiva a los españoles a emprender.
La situación tampoco ayuda
Además de estas percepciones, la realidad económica en España presenta obstáculos adicionales para los emprendedores, como la inflación, los impuestos y las cotizaciones para los autónomos, que no contribuyen a fomentar el crecimiento empresarial. De hecho, cerca del 40% de los autónomos en el país ha experimentado una disminución en sus ingresos en comparación con 2022, lo que aumenta el riesgo de tener que cesar su actividad económica por cuenta propia.
A su vez, el acceso a ayudas gubernamentales para emprendedores resulta escaso, tal como lo indica el Informe III del Estudio Nacional del Autónomo, donde solo el 14,4% de los autónomos recibió algún tipo de asistencia. Además, el 43,1% consideró que el proceso para solicitar estas ayudas era demasiado complicado.
La juventud emprendedora ¿el futuro?
A pesar de estas dificultades, se observa una tendencia al emprendimiento en las comunidades más destacadas de España, como Madrid, Cataluña o Valencia, donde el Índice de Actividad Emprendedora Temprana (TEA) supera la media nacional. Por ende, estas regiones buscan incentivar y mantener este emprendimiento, con el propósito de construir un tejido empresarial resistente, centrándose más en los jóvenes emprendedores.
Distribución de las personas emprendedoras por edad 2021-2022 (GEM APS, 2022)
El informe del GEM para el año 2022-2023 destaca que los jóvenes son el grupo con mayor potencial para emprender, ya que poseen más conocimientos y motivación que otros segmentos poblacionales.
Aunque el TEA y las empresas consolidadas dirigidas por jóvenes emprendedores son menos comunes en España, la tasa de abandono de sus proyectos es menor en comparación con otros grupos, lo que sugiere que los incentivos para fomentar su emprendimiento podrían ser más efectivos.
Cataluña apuesta por los jóvenes
En este contexto, comunidades autónomas como Cataluña han decidido lanzar ayudas específicas para los jóvenes emprendedores menores de 30 años. Con una asignación de 13 millones de euros destinados a este fin, buscan alentar a la juventud a convertir sus ideas en realidades empresariales, incentivando el registro de autónomos y el inicio de sus negocios en la región.
Esta iniciativa puede considerarse acertada, ya que ayudará a acercar a España hacia una mentalidad emprendedora más cercana a la europea, fomentando el espíritu innovador y contribuyendo al crecimiento económico del país en un futuro cercano. Sin embargo, para lograr un cambio significativo, se requerirá un esfuerzo conjunto entre el gobierno, las instituciones y la sociedad para superar los obstáculos existentes y crear un entorno más propicio para el emprendimiento en toda España.