Es importante tener en cuenta que, al recibir ingresos adicionales, siempre se debe declarar a Hacienda la procedencia de dichos fondos.
En el caso de las subvenciones, en la mayoría de los casos, se debe tributar por ellas. Hacienda considera las subvenciones y ayudas como un activo sujeto al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), a menos que se trate de una excepción explícitamente indicada en el acuerdo de concesión de la ayuda.
¿Qué subvenciones debo declarar?
Hay algunas ayudas exentas del IRPF, aquellas que no tributan como ganancias patrimoniales ni como rendimientos de trabajo. Ejemplos de esto son las prestaciones por incapacidad, prestaciones de adopción, prestaciones por orfandad, entre otras.
Por otro lado, existen ayudas y subvenciones que sí están sujetas al IRPF y se clasifican de diferentes maneras:
Ayudas reconocidas como ganancias patrimoniales
Están ligadas a un elemento patrimonial y no se consideran resultado de una actividad económica.
Pueden ser:
- Ayudas para la adquisición o rehabilitación de la vivienda habitual
- El Plan Renove
- Ayudas para la adquisición de vehículos sostenibles…
Ayudas clasificadas como rendimientos de actividades económicas
En este caso, las ayudas se contabilizan como ingresos ordinarios del ejercicio y como gastos relacionados con la actividad económica de la empresa.
Esto aplica a:
- Las subvenciones obtenidas para recuperar gastos realizados dentro de un periodo subvencionable.
- Ayudas para futuras inversiones relacionadas con la actividad económica.
Ayudas clasificadas como rendimientos del trabajo
Esto incluye prestaciones por desempleo, jubilación, prestación de viudedad, entre otras.
No obstante, es posible que el nivel de ingresos exento al IRPF pueda afectar la tributación de estas ayudas.
¿Cuando deben declarar las subvenciones las empresas y autónomos?
Cuando se trata de autónomos y empresas, es importante tener en cuenta cuándo deben declarar las subvenciones.
- En el caso de ayudas y subvenciones de pago único, que son entregadas en su totalidad al momento del cobro, deben declararse en el año en que se reciben y no en el momento de su concesión.
- Sin embargo, en el caso de subvenciones que se pagan en varios plazos, la forma de tributación puede variar y es importante estar al tanto de las regulaciones vigentes.
En cualquier caso, es recomendable contar con el asesoramiento de un profesional para asegurar el cumplimiento adecuado de las obligaciones fiscales.